Revolución micelar: el secreto de una limpieza facial perfecta
La tecnología micelar limpia y desmaquilla con suavidad, respetando el equilibrio de tu piel sin necesidad de enjuagar.
La tecnología micelar limpia y desmaquilla con suavidad, respetando el equilibrio de tu piel sin necesidad de enjuagar.
Las micelas, como imanes, capturan impurezas y maquillaje sin necesidad de frotar, respetando el equilibrio de la piel.
La tecnología micelar se basa en micelas, estructuras microscópicas formadas por moléculas con una parte hidrófila (atrae agua) y otra lipófila (atrae aceites). Estas micelas actúan como imanes inteligentes que capturan selectivamente impurezas, sebo y residuos de maquillaje sin necesidad de frotar o enjuagar.
Las micelas son agregados moleculares que se forman cuando los tensioactivos suaves alcanzan una concentración específica en agua. Su estructura única permite:
El agua micelar original, Sensibio H2O, pasa por múltiples etapas de filtración y está formulada con un pH similar al de la piel (5.5), explicando su excepcional tolerancia.
Limpia suavemente, calma la irritación y aumenta el umbral de tolerancia de la piel.
Las pieles sensibles son vulnerables a los limpiadores tradicionales, que pueden provocar tirantez e irritación. Sensibio H2O está específicamente formulada para estas pieles, con una composición minimalista y el complejo Toléridine™ que aumenta el umbral de tolerancia cutánea.
Estudios clínicos demuestran que su uso regular reduce la sensibilidad cutánea en un 80% después de 4 semanas. Para un cuidado completo, puede complementarse con Sensibio Light.
Este tipo de piel requiere una limpieza que purifique y regule la producción de sebo sin resecar. Las soluciones micelares para piel grasa incorporan activos seborreguladores y purificantes que limpian los poros en profundidad, eliminan el exceso de brillo y ayudan a prevenir la aparición de imperfecciones, manteniendo el equilibrio natural de la piel.
La limpieza en pieles con manchas debe ser extremadamente suave para no generar inflamación que pueda empeorar la pigmentación. Las aguas micelares para esta condición están diseñadas para eliminar eficazmente maquillaje e impurezas mientras contienen ingredientes activos que ayudan a reducir la visibilidad de las manchas oscuras y unificar el tono, devolviéndole luminosidad al rostro.
A diferencia de leches y aceites, su textura ligera no deja sensación grasa.
Las aguas micelares tienen textura acuosa y ligera, no dejan sensación grasa (ideal para pieles mixtas y grasas) y pueden usarse en rostro, ojos y labios sin riesgo de irritación ocular.
Para maquillaje waterproof intenso, puede ser necesario un desmaquillante específico como Sensibio H2O Eye, formulado para la delicada zona periocular.
Perfecta para la limpieza matutina y como primer paso esencial en la doble limpieza nocturna.
Limpia en profundidad, no necesita enjuague y su fórmula sí marca la diferencia
Realidad: Las micelas capturan eficazmente impurezas tanto hidrosolubles como liposolubles. Estudios confirman que el agua micelar elimina hasta el 99% de partículas de contaminación y maquillaje.
Realidad: Las aguas micelares de Bioderma están formuladas para no requerir enjuague. Su composición minimalista y las múltiples etapas de filtración garantizan que no dejan residuos.
Realidad: Existen diferencias significativas en la formulación. Sensibio H2O, la primera agua micelar dermatológica, fue desarrollada tras años de investigación para garantizar máxima eficacia y tolerancia.
Respeta el ecosistema de tu piel, preservando su barrera, equilibrio y pH fisiológico.
La filosofía ecobiológica de Bioderma se basa en trabajar con la piel, no contra ella. Este enfoque se refleja en la tecnología micelar, que:
Este respeto por la biología cutánea explica por qué productos como Sensibio H2O son recomendados por dermatólogos para pieles sensibles y post-procedimientos estéticos.
La limpieza facial ha sido transformada por la tecnología micelar, que logra una limpieza profunda sin dañar la piel. Más que una moda, es un avance científico que prepara la piel para recibir otros tratamientos, ya que mantiene su barrera protectora intacta y su equilibrio natural. Usar agua micelar es el primer paso para una piel más sana y luminosa, ya que respeta su fisiología desde el principio.